¡Tú puedes hacer que tu vida sea como quieres que sea! ¡Porque recuerda que la belleza está en ti!
Hoy en día entendemos la belleza como un bien integral, donde los centros de estética, como especialistas de la piel, cuidan, miman y recomiendan a los clientes aquello que es más adecuado en cuanto al tratamiento, enseñan los rituales de aplicación que se pueden continuar en casa y que van a hacer que estemos aún más bellas. Sabemos también que cuanto más bonitas nos vemos por dentro, más bellas lucimos por fuera. Y ahí, es donde profundizamos en nuestro interior, para complementar y enriquecer los tratamientos de la piel con el cuidado de las emociones. Ana Puelles Lostao, precursora de la estética en Zaragoza y directora actual del prestigioso centro LOSTAO, nos deja una serie de recomendaciones de cómo podemos escucharnos internamente para sacarnos más partido a nosotras mismas y a las situaciones bonitas que nos brinda la vida.
Ana Puelles Lostao indica: “debemos cuidar de nosotras mismas en mayúsculas, cuidando nuestra autoestima y la actitud con la que nos enfrentamos a nuestro día a día. Para ello, asegura que debemos tomarnos un tiempo para parar y reconocer el estado en el que estamos y así, conocernos mejor. Recurriremos al autoconocimiento, para darnos cuenta de quién estamos siendo y si concuerda o no con quien queremos ser realmente.”
Nuestras emociones pueden interferir en nuestra belleza hasta el punto de que, ante un mismo hecho, le podemos dar una interpretación u otra a lo que está sucediendo. Y, por lo tanto, también vamos a obtener un resultado u otro. Por ejemplo, si pensamos en la aplicación de un producto cosmético que nos hemos comprado, dependiendo de la situación actual en la que nos encontremos, lo viviremos de una manera u otra. Si nuestro estado emocional está en decaída y tenemos ganas de que nuestro día termine, nos aplicaremos el producto con prisa y sin disfrutarlo. Sin embargo, si estamos de viaje de fin de semana con amigas y nos llevamos nuestro producto nuevo, en el momento de usarlo, nos encontraremos en un ambiente distendido y lo aplicaremos relajada y detenidamente.
La relación que existe entre lo que pensamos, lo que sentimos y lo que hacemos. Según Ana Puelles Lostao, las emociones que sentimos, en su mayoría, son una reacción inmediata a un estímulo. Y ese estímulo, nos provoca un pensamiento. Entonces, si nos decimos a nosotras mismas cosas negativas, nos estamos autocastigando por algo y pensamos que no somos capaces de hacerlo. Todo eso genera un sentimiento de tristeza y empezamos a ver el mundo como un lugar hostil, donde creemos que todo lo malo nos pasa a nosotras. Entramos en una rueda de insatisfacción y tristeza de manera inconsciente, provocando una reacción física en el cuerpo y un aumento de los niveles del cortisol, la hormona del estrés. Automáticamente, se observan cambios en nuestro organismo. Porque nuestro cuerpo está diseñado para poder reaccionar y hacer frente a las situaciones que consideramos de amenaza. “Y de hecho, tiene que ser así, porque este instinto hace precisamente que podamos protegernos. Es el instinto de supervivencia.”, explica Ana. Si lo extrapolamos a la piel, sabemos que si cuidamos e hidratamos nuestra piel de manera continuada, esta se verá más bonita y sana. Pero, si además pensamos en cosas bonitas y alegres, estaremos generando emociones de alegría, satisfacción, felicidad y en consecuencia eso hará que nos comportemos de la misma manera y reaccionemos desde esta emoción a las diferentes situaciones.
“Sin darnos cuenta, vamos atrayendo a nuestra vida precisamente aquello de lo que nos pretendemos alejar, porque es bien cierto que la vida es como un reflejo, que te devuelve aquello que emites.” – Ana Puelles Lostao
Pero, desafortunadamente, muchas veces estas situaciones nos llevan a perder un poco la autoestima. En palabras de Ana Puelles Lostao, “El tema de la autoestima es algo de lo que se habla mucho, y a veces pensamos que el tener autoestima es solo el hecho de querernos mucho, de creerme que soy bueno en lo que hago. Y no es tanto así, porque una autoestima saludable es que, por supuesto, tengamos una autoestima que nos haga sentir bien con nosotros mismos, pero que también podamos establecer relaciones buenas con los demás y nos relacionemos bien en la sociedad.
Porque, ¿qué pasa cuando una persona está sobreestimada? Podemos caer en un tema de ego. En cambio, cuando tenemos una baja autoestima, la persona lo nota hasta en su caminar, en su aspecto. Es una persona que no acepta un fracaso, ya que enseguida que le pasa alguna cosa que se sale de su control y se viene abajo. Entonces, la autoestima saludable sería ni mucho ni poco: un punto medio.”
Y, ¿cómo podemos liberar estrés y sacar fuera esos momentos tensos? El ejercicio físico juega un papel también importante en estos procesos, ya que ayuda a generar una serie de hormonas que te dan sensación de felicidad. Además, cuando estamos hablando de bienestar integral, la alimentación también forma parte de ese conjunto. Y también es importante cuidarla. Eso nos hace sentir bien con nosotras mismas, ya sea porque los alimentos nos proporcionan energía y es lo que necesitamos para avanzar en el día a día, o bien porque nos dan satisfacción. También existe la alimentación emocional. Este tipo de alimentación se produce cuando consumimos alimentos que normalmente son más placenteros que saludables, y que se comen como respuesta a un estado de ánimo como el estrés, la tensión, la preocupación. Buscan hacernos sentir bien mentalmente de manera inmediata, en vez de alimentarnos o satisfacer el hambre.
También podemos recurrir al “coaching” cuando nos resulta complicado gestionar una situación que estamos viviendo, nos angustia y que, al sentir un bloqueo, no somos capaces de verle la respuesta y la salida. Desde el “coaching”, a través de una serie de conversaciones de preguntas y respuestas, se atiende a ese bloqueo o esa situación que en ese momento no nos permite avanzar a donde queremos llegar. Nos ayuda a acompañarnos en ese camino para avanzar hacia dónde queremos. Finalmente, Ana Puelles Lostao nos recomienda que nos tomemos un instante de reflexión para nosotros mismos. Que nos demos el permiso para escucharnos, que pensemos en qué emoción estamos ahora y sea agradable o no tanto, la reconozcamos, seamos conscientes de ella y le demos el espacio necesario para que podamos reaccionar del modo en el que queremos reaccionar. Que cuidemos mucho lo que nos decimos, porque eso influye directamente en lo que sentimos y en cómo actuamos. Y que también pensemos que nosotros somos los únicos que podemos cuidarnos de nosotros mismos. “No estar bien por dentro refleja lo que proyectamos. Por eso, debemos de empezar a cambiar también la forma en que nos sentimos, porque eso nos hará brillar desde el interior y brillar con luz propia”.
La entrada Cuanto más bella luces por dentro, más bella luces por fuera se publicó primero en Revista Vidaestetica – Estética, Healthy Life & Wellness.