Revista VidaEstética & Spa #515
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Radiofrecuencia con microagujas para un efecto lifting inmediato sin cirugía

Grupo Pedro Jaén La Moraleja incorpora a su Unidad de Estética Facial la última novedad en radiofrecuencia

La filosofía de trabajo de todas las unidades que conforman el Grupo Pedro Jaén se basa en “aplicar el tratamiento menos agresivo posible para obtener el resultado más efectivo”. Para poder ponerla en práctica es necesario contar con un equipo de profesionales de primer nivel que conozcan y perfeccionen las técnicas quirúrgicas más avanzadas y que se ayuden de la tecnología más sofisticada.

Por este motivo, Grupo Pedro Jaén La Moraleja ha incorporado recientemente varias plataformas para llevar a cabo tratamientos faciales y corporales que logra el máximo resultado con la mínima invasión. Una de ellas es radiofrecuencia con agujas, una tecnología que logra excelentes resultados a la hora de mejorar la calidad de la piel, atenuar las cicatrices, tratar la flacidez y remodelar el óvalo facial, bien cuando se usa en solitario, bien cuando se combina con otras opciones disponibles en nuestro centro en el caso de que haya que abordar varios problemas a la vez.

“La clave es llevar a cabo un diagnóstico personalizado y elaborar un protocolo terapéutico que responda a las necesidades de cada paciente buscando siempre una mejoría estética integral que redunde en una mayor satisfacción del paciente”, explica el Dr. Luis Ríos, responsable de la Unidad de Estética Facial de Grupo Pedro Jaén La Moraleja en la que se integra este nuevo equipo de radiofrecuencia y experto en diversos procedimientos de rejuvenecimiento facial no quirúrgicos y cirugía mínimamente invasiva.

Una de las ventajas más destacadas de este nuevo equipo, además de su procedimiento mínimamente invasivo, es que no requiere hospitalización ni sedación, únicamente anestesia tópica, es que puede aplicarse tanto en el rostro como en el cuerpo. Además, puede aplicarse en todo tipo de pieles, incluso en los fototipos más oscuros y que se lleva a cabo, según la profundidad de penetración de las agujas, con anestesia tópica o local, si el tratamiento es más profundo.

Las sesiones (se requiere una media de tres, aplicadas con un intervalo de entre seis y ocho semanas, aunque pueden oscilar entre una y cinco, según cada caso) son ambulatorias, después de las cuales el paciente se marcha a casa por su propio pie. Los resultados son completamente naturales y empiezan a verse inmediatamente después del tratamiento, que suele repartirse en sesiones cada mes y medio o dos meses (generalmente se requiere una media de tres). Éstos van mejorando a medida que avanzan las semanas y se suele considerar que el aspecto definitivo se logra a los tres meses. No obstante, se prolongan algo más de un año contando después de la última sesión.

Además, los diferentes aplicadores ofrecen una gran versatilidad del equipo de radiofrecuencia, están diseñados para adaptarse a cualquier zona que necesite un tratamiento renovador para mejorar la calidad de la piel: patas de gallo, arrugas de la frente y del entrecejo, “líneas de marioneta”, atenuar surcos nasogenianos, “código de barras”, arrugas periorbitales. reduce el tamaño de los poros, mejora la calidad y tono de la piel, trata marcas y cicatrices de acné, papada y flacidez del cuello.

¿Cómo es la radiofrecuencia con microagujas?

La radiofrecuencia es una tecnología clásica muy consolidada dentro de los tratamientos de belleza, así como en dermatología y medicina estética. Lleva años utilizándose en múltiples protocolos faciales y corporales debido a su efecto rejuvenecedor y a que actúa de manera no invasiva, ya que la mejoría de la calidad y el estado de los tejidos se produce mediante la inducción de calor en la piel para estimular la producción de nuevo colágeno y elastina, dos sustancias que vamos perdiendo a medida que cumplimos años (además de por otros factores) y que están implicadas directamente en la calidad y en la firmeza de la piel.

La nueva radiofrecuencia fraccionada con microagujas es un sistema de remodelación de la piel que combina las ventajas de la radiofrecuencia clásica con la acción de una matriz de agujas de calibre muy fino que penetran en la piel para “inyectar” la energía calorífica que genera el equipo a un nivel mucho más profundo de la dermis.

El objetivo de este revolucionario microneedling, además de promover la producción de colágeno y elastina, no es otro que aprovechar los mecanismos de regeneración de los tejidos que se activan por el mero hecho de recibir los pinchazos, coagular la grasa y tensar el tejido conectivo, una suma de factores que logra un efecto rejuvenecedor total mucho más potente.

El dispositivo cuenta con aplicadores con distinto número de agujas de acero inoxidable recubiertas de oro que, además, pueden alcanzar diferentes profundidades de penetración para que el especialista pueda seleccionar el más adecuado para cada paciente según el objetivo que se quiera cumplir.

De esta forma, dicha tecnología permite hacer desde tratamientos de resurfacing para renovar la superficie de la piel hasta un remodelado dérmico y subdérmico más completo alcanzando incluso el tejido adiposo.

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